Haz una donación a la película

Mitología de barrio

espírituescalera Espanya 70' VOSC
En la periferia de una ciudad, un hombre dormita en su tienda de alimentación, durante una calurosa tarde de verano. Un sueño premonitorio le sobresalta; mañana la ciudad habrá cambiado para siempre y nadie recordará como volver a casa.

"Mitología de barrio" es una película hecha, e imaginada, a pie, recorriendo todos y cada uno de los barrios que rodean el centro de una ciudad, concretamente Madrid. Sin embargo, no es una película sobre Madrid; es sobre todo un cuento, un pequeño mito, sobre los territorios urbanos que habitamos en las sociedades estatales y capitalistas.
Ver la película
Biografía

espírituescalera es un colectivo de cine que tiene como propósito explorar, pensar y realizar proyectos audiovisuales y cinematográficos que trasciendan la anécdota personal e individualista y que aborden cuestiones, atmósferas y narrativas que interpelen a lo colectivo y al conflicto cotidiano. 

Hasta el momento, diferentes piezas como por ejemplo "La insurrección que viene", "Sistema nervioso" o "Carmen dormida, Carmen despierta", han recorrido diferentes festivales de cine y espacios de proyección y exhibición. Actualmente, el colectivo se encuentra en pleno desarrollo de diferentes proyectos cinematográficos, como los largometrajes “La muerte no pudo con él”, “Laguna”, “El Ministro” o “Los Atlantes”, así como en postproducción de otros proyectos, incluyendo “Dulcinea” o “La Llorona.”

Ficha técnica
Duración: 70'
Dirección: espírituescalera (Alejandro Pérez Castellanos, Antonio Llamas y Jorge Rojas)
País: España
Idioma: Castellano, Chino
Versión: VOSC
Metodología

"Mitología de barrio" nace en 2018 como un proyecto sobre el recorrido físico y audiovisual de la periferia de la ciudad de Madrid. Para ello se trabajó con algunas reglas formales: no localizar previamente; filmar en escala de plano general simulando una postal turística en lugares que jamás tendrían una postal; filmar siempre bajo la luz del sol, como si todos los momentos registrados estuviesen sucediendo durante una calurosa tarde de verano en un mismo instante; no pretender registrar lo real, entendiendo que la realidad es también una cuestión ideológica, tanto en su funcionamiento como en su comprensión. 

Así el equipo de realización paseo por la ciudad sin rumbo, entre los barrios que habitan, sin asimilar el proyecto a los cauces burocráticos de instituciones o circuitos de laboratorios y festivales. El equipo de rodaje se limitaba a tres personas. Con el paso del tiempo el material reveló un posible cuento, un pequeño mito que permitiese fantasear y hablar sobre la realidad desde la ficción y desde premisas ideológicas que se enfrentasen a la realidad dominante. Solo después de tener la mayoría de las imágenes filmadas escribieron el guion y posteriormente el proceso de montaje y postproducción que fueron también procesos de escritura de guion. Inevitablemente también llegaron los cauces burocráticos, aunque por suerte cuando la película ya estaba prácticamente terminada.